Arbol en llamas

				El cielo se rasgó con un relámpago blanco.
				y sobre las almas que duermen cayó el espanto…
				Charles Baudelaire
 
Cuantos siglos hay que esperar
para que el cielo descargue su energía
en un sitio.
Hace treinta años
los abuelos hicieron su casa
en medio de un descampado.
Plantaron el árbol
que le daría sombra.
 
Una noche de tormenta
un estruendo ensordecedor
los sacudió.
 
Vieron como las ramas reventaron
y se alzaron en llamas.

Luego
el crepitar
y viento caliente.

Toda la noche
el fuego dibujo figuras.
Reconocieron animales
y rostros familiares en las llamas.
La abuela afirmaba haber visto
al mismísimo satanás
con el tiempo agrego un combate
entre ángeles y demonios.
Pasaron la noche aterrados por esas lenguas de fuego
iluminándolos
en la puerta de la casa.
 
Cuando amaneció,
el árbol permanecía de pie
como un esqueleto negro.
 Las ultimas hebras de humo
todavía les contaban otras historias
que prefirieron callar.
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Desde ese día
Un caballo fantasma 
ronda la casa de mi abuelo.